Avatar más que una película de ciencia ficción es una historia que debemos ver para tomar una mayor conciencia del daño que día tras día le propinamos a nuestro planeta tierra, este que nos ha proporcionado la vida y todo lo que tenemos y podemos disfrutar al día de hoy ha sido y seguirá siendo la tierra la encargada de facilitarnos todo.
Sin embargo, al desidia, la ambición desmedida, el ansia de poder no nos permite darnos cuenta al igual que como nos cuenta la historia de Avatar con los Na’vi, los habitantes de Pandora, esa tierra mágica y prodigiosa, que les proporciona alimentos, bienestar, que le da seguridad y los mantiene sanos y salvos, hasta que llegan los implacables y mercenarios de la supuesta civilización, sólo tras el oro corruptor, el deseo inmenso de poseer poder y riqueza a toda costa, incluso desvirtuando el papel de la tierra.
Podemos apreciar en esta historia que nos presenta Avatar como no podemos apreciar la conexión existente entre los seres humanos con la tierra, la belleza de la naturaleza la dejamos a un lado, obviamos lo importante y trascendente que es el hecho de estar conectado a un entorno, donde sólo se respira paz y se piensa en vivir cada segundo, sin dañar a sus semejantes, porque simplemente están pensando en vivir a tono con la naturaleza, cuidando y disfrutando de lo hermoso y las riquezas aunque no materiales que nos proporciona la tierra.
Cada día nos empecinamos en destruir lo hermoso que poseemos, sólo en busca de riquezas que al fin y al cabo solo sirven para traer nuevas desgracias a la población mundial, mientras millones de personas mueren cada año a causa de la ambición desmedida de las grandes corporaciones conjuntamente con los gobiernos, detrás de riquezas, sin importar las consecuencias, aunque hoy día sufrimos las inclemencias y desastres que hemos cosechado durante años, por el maltrato continuo a la tierra, sin embargo, eso no es óbice para que las grandes corporaciones y gobiernos sigan destruyendo a toda costa los recursos naturales, del mismo modo que hicieron en Avatar.
