Otro uso de los materiales cerámicos, es la de elaborar los vidrios y cristales. Estos asombrosos materiales que dejan pasar la luz casi con total libertad también son considerados cerámicos. Estos materiales son tan extremadamente duros que incluso si se afilase un pequeño trozo de vidrio en forma puntiaguda, estos podrían rallar la superficie del acero. Desde luego el inconveniente es que al ser tan duros, no se pueden deformar, ya que en cuanto se les somete a una fuerte presión o fuerza, se rompen en mil pedazos. Por ello no son utilizados para soportar cargas, aunque sean sumamente duros, ya que inmediatamente que se supera la fuerza máxima que pueden soportar, en lugar de estirarse o deformarse, simplemente se quiebran. El más claro ejemplo de esto podría ser una taza, las que usamos para beber café, estas no pueden flexionarse ni estirarse hacia ningún lado. Si dejamos caer algún objeto cerámico de cierto peso, como la taza de cerámica, junto con polímeros o metales del mismo peso, casi con toda seguridad el cerámico se romperá, mientras que los polímeros y los metales tendrían una mucha mayor posibilidad de sobrevivir la caída.

Gonzalo Curiel, soy estudiante de Ingeniería Química Metalúrgica y radico en México. Llevo cerca de 2 años trabajando como redactor en diversas temáticas tanto en español como en inglés. Manejo el idioma inglés al 97% de acuerdo al certificado TOEFL, avalado por Cambridge University y tengo 25 años.

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