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Cada material del que están elaborados los diferentes instrumentos y objetos que utilizamos día con día tienen una función específica y, por ende, son diseñados con características especiales para desempeñar aquellas funciones. Hoy en día, uno de los materiales más utilizados en casi todo lo que nos rodea, son los polímeros. Entonces, ¿qué son los polímeros? Son compuestos químicos que resultan de ciertas reacciones, muchas de las cuales, pero no todas, incluyen derivados del petróleo. La reacción se llama polimerización, de allí el nombre de polímeros. Sin entrar mucho en detalle, la reacción anterior generalmente involucra unas moléculas uniéndose unas con otras en una reacción rápida y en cadena. La consecuencia son arreglos moleculares que le confieren diferentes capacidades y características a los polímeros.

Una de las principales características de los polímeros es que pueden soportar una carga considerable antes de deformarse permanentemente. Esto quiere decir que si se aplica una carga específica, el material puede recuperar sus características iniciales sin sufrir una deformación evidente. Pasando la fuerza máxima que puede soportar el material sin deformarse, se comienza a deformar de manera permanente, es decir, ya no se podrá recuperar el material a su estado inicial. Adicionalmente, se les denomina plásticos porque, en algún momento de su elaboración o bien de su uso, tienen propiedades plásticas.

Entonces, a forma de resumen, los polímeros son compuestos orgánicos, generalmente con estructuras moleculares gigantescas y que son obtenidos de manera sintética, es decir, no existen en la naturaleza. Ahora, ¿para qué se usan? Se pueden usar cuando se necesiten materiales o bien muy flexibles, de baja dureza o bien cuando se necesitan usar materiales económicos, ya que la mayoría de los plásticos son relativamente económicos (aunque también existen algunos de costo elevado, como el policarbonato). Con alguna excepción, los plásticos suelen ser sencillos de obtener y fáciles de modelar, por lo que son perfectos para métodos de producción en serie, ya que permite reducir considerablemente los costos de ciertos productos. Este último punto, el de la producción en serie, ha sido el responsable de la amplísima distribución que ha tenido este compuesto químico en un sin fin de procesos y productos en la actualidad.